JOHN NEWCOMBE/CAPITAN DE AUSTRALIA DE LA COPA DAVIS
«Para ganar, tendrán que matarnos»
Martes, 25 de julio de 2000
«Juan Carlos Ferrero es un jugador impresionante que estoy seguro llegará a ser número uno»
Su temperamento le ha conducido al triunfo y no teme a España. Después de siete años como capitán del equipo australiano de Copa Davis, John Newcombe [Sydney, 56 años] ha creado un grupo campeón que ha ganado las últimas ocho eliminatorias que ha disputado [no pierde desde abril de 1998]. Los próximos 8, 9 y 10 de diciembre su equipo se medirá a España. Ayer, en conversación telefónica desde Brisbane, este ex número uno mundial que ganó cinco Grand Slams como jugador.
¿Para usted es una sorpresa encontrarse a España en la final?
No, contábamos con ello. España tiene cuatro o cinco jugadores de primer nivel. Corretja es el líder, pero también hay otros, incluso Moyà, que podría estar en la final. Lo que sí fue una sorpresa es que Ferrero no jugara los primeros individuales ante Estados Unidos, porque es un jugador impresionante que estoy seguro llegará a ser número uno.
¿España es favorita?
En tierra, sí, pero esta final será larga y muy dura. Que nadie olvide que llevamos más de dos años sin perder una eliminatoria y luchamos todos juntos hasta el final. Para que nosotros perdamos, los españoles tendrán que matarnos.
Sus palabras suenan ciertamente intimidatorias.
Nosotros somos el mejor equipo del mundo contando todas las superficies. Si jugáramos en hierba, ganaríamos fácilmente; en cemento, también; y, en tierra, ellos son favoritos, pero podemos ganar. Si vencemos en España, seremos el mejor equipo australiano de la historia.
Rafter y, en menor medida Hewitt, lideran el equipo. ¿Cuáles son sus virtudes?
Después de ganar el título en 1999, yo pensé en dejar el puesto de capitán, pero decidí seguir una temporada más para que Pat [Rafter] viera hecho realidad su sueño de ganar la Davis [en 1999, no participó al estar lesionado]. El desea conquistarla como sea. Hewitt está aprendiendo rápidamente y ya ha madurado mucho.
Philippoussis fue el héroe de la final de 1999, pero usted no cuenta con él para la final porque renunció a jugar ante Brasil hace dos semanas.
Oficialmente, estaba lesionado. Ya veremos en su momento si viene a España.
Los capitanes españoles han pedido jugar en tierra batida y al aire libre, pero la FIT puede obligar a jugar en pista cubierta. ¿Tiene alguna preferencia?
Para mí, es lo mismo. Va a ser la misma tierra batida y no creo que influya mucho jugar en cubierto o al aire libre. Cualquiera que sea la opción, Rafter y Hewitt están preparados y deseosos de luchar a muerte por ganar. Además, tenemos sorpresas para España que descubriré allí.
Usted fue jugador del equipo que derrotó a España en la segunda de las dos finales que ha disputado, en 1967. ¿Ha cambiado mucho el equipo español?
En 1967, sólo estaban Santana y Orantes, que eran grandes jugadores, pero ahora hay muchos más jugadores buenos. Por entonces, tenían un doble muy bueno [formado por Santana y Arilla, aunque éste último se lesionó y, en la final, le sustituyó Orantes]. Ahora, el dobles español no tiene la categoría suficiente.
Pero Corretja y Balcells derrotaron a Martin y a Woodruff el sábado en Santander.
Sí, pero Martin y Woodruff no habían jugado juntos antes y no fue una sorpresa que perdieran. Woodbridge no estará para la final porque espera un niño para esas fechas, pero yo cuento con Mark Woodforde y con Sandon Stolle. Las cosas serán diferentes a cuando jugaron contra los americanos.
¿Realizarán una preparación especial para adaptarse a la tierra batida?
Sí. El año pasado, antes de jugar contra Francia en Niza, pasamos 10 días en San Remo entrenando sobre tierra. Este año iremos al sur de España.
Fuente: el mundo